ArchDaily. (s.f.). Robin Hood Gardens / Alison & Peter Smithson. ArchDaily. Recuperado el [fecha de consulta], de https://www.archdaily.mx/mx/02-20090/robin-hood-gardens-alisonpeter-smithson
Contexto
En la década de 1960, el Reino Unido enfrentaba una crisis de vivienda debido a la destrucción causada por la Segunda Guerra Mundial y al rápido crecimiento demográfico. En respuesta, se promovió la construcción de viviendas sociales que pudieran albergar a un gran número de personas en espacios reducidos.
Robin Hood Gardens fue un complejo residencial emblemático situado en el este de Londres, diseñado por los arquitectos Alison y Peter Smithson y completado en 1972. Este proyecto representó un enfoque innovador en la vivienda social de la posguerra británica, buscando redefinir la vida urbana a través de su diseño arquitectónico.
Concepto
Los Smithson, influyentes miembros de la Architectural Association, propusieron una solución que desafiaba las convenciones de la época. Inspirados por su concepto de «calles en el cielo», diseñaron Robin Hood Gardens con amplios pasillos elevados que pretendían emular la interacción social de las calles tradicionales, fomentando un sentido de comunidad entre los residentes.
Diseño y Construcción
El complejo constaba de dos bloques curvos de hormigón prefabricado, uno de diez pisos y otro de siete, que albergaban un total de 213 viviendas.
Los apartamentos eran una combinación de unidades de una sola planta y dúplex de dos niveles, con entre dos y seis dormitorios.
Los pasillos elevados, conocidos como «calles en el cielo», se ubicaban cada tres pisos y tenían como objetivo proporcionar espacios públicos donde los residentes pudieran interactuar y los niños jugar.
Se incluyeron «espacios de pausa» junto a las entradas de los apartamentos, diseñados para ser personalizados por los residentes y fomentar la convivencia.
Funcionalismo
El diseño de Robin Hood Gardens se caracterizaba por su estética brutalista, con el uso predominante de hormigón expuesto y formas geométricas robustas.
Los bloques estaban orientados de manera que las áreas de estar de los apartamentos miraran hacia el interior, protegiendo a los residentes del ruido del tráfico circundante.
Entre los dos bloques se encontraba un espacio verde central con una colina artificial, pensado como un área de recreo y esparcimiento para los habitantes, proporcionando un respiro del entorno urbano denso.
Controversia y Demolición
A pesar de las intenciones innovadoras de los Smithson, Robin Hood Gardens enfrentó críticas desde sus primeros años. Problemas relacionados con el mantenimiento, la percepción de inseguridad y el aislamiento social llevaron a que el complejo fuera visto como un ejemplo fallido de vivienda social.
A lo largo de los años, hubo debates sobre su conservación, con arquitectos y organizaciones abogando por su preservación debido a su valor arquitectónico e histórico. Sin embargo, en 2017, se inició la demolición del bloque occidental, y se planificó la demolición del bloque oriental posteriormente, para dar paso a un nuevo proyecto de regeneración urbana que incluirá la construcción de 1.575 nuevas viviendas.
