En Róterdam, Países Bajos, el proyecto SAWA, diseñado por Mei Architects, representa una evolución del brutalismo hacia una arquitectura más sostenible y humanizada. Este edificio residencial de 50 metros de altura se construirá completamente en madera laminada cruzada (CLT), destacando por sus amplias terrazas verdes que fomentan la biodiversidad urbana.

SAWA mantiene la honestidad material y la monumentalidad ética del brutalismo, utilizando materiales expuestos y formas geométricas claras. Sin embargo, incorpora principios de eficiencia energética y conciencia ambiental al emplear madera como material principal y al integrar vegetación en sus terrazas.

El diseño de SAWA prioriza la sostenibilidad y la calidad de vida de sus residentes, ofreciendo espacios exteriores privados y comunitarios que promueven el bienestar y la interacción social. Este enfoque refleja una transición hacia el ecobrutalismo, donde la arquitectura combina funcionalidad, estética y responsabilidad ambiental.