Fuente:

The Brussels Times. 19 de noviembre de 2022. Fates of the Porte de Hal, Japanese Tower and Chinese Pavilion hang in balance. The Brussels Times. https://www.brusselstimes.com/323094/fates-of-the-port-de-hal-japanese-tower-and-chinese-pavilion-hang-in-balance. Consultado el 25 de febrero de 2025. – Tripaim. (s.f.). Pabellón Chino de Bruselas: historia, arquitectura y visita. Tripaim. https://tripaim.com/blog/bruselas/pabellon-chino/#elementor-toc__heading-anchor-3. Consultado el 25 de febrero de 2025. – The Bulletin. (s.f.). New owner and name for Chinese Pavilion in Laeken. The Bulletin. https://www.thebulletin.be/new-owner-and-name-chinese-pavilion-laeken. Consultado el 25 de febrero de 2025. –


Ubicación

El Pabellón Chino es parte del conjunto de «Los Museos del Lejano Oriente», que incluyen: el ya mencionado Pabellón Chino, la Torre Japonesa y el Museo de Arte Japonés, dedicados al arte y la cultura oriental, especialmente de China y Japón. Estos se encuentran en Laeken, al noreste de la ciudad de Bruselas, Bélgica.

Historia

Tanto el Pabellón Chino como la Torre Japonesa que lo acompaña fueron construidos entre los años 1901 y 1905 por encargo del rey Leopoldo II, quien, durante la ocupación colonial en el Congo, acumuló riquezas. El arquitecto encargado del diseño fue Alexandre Marcel.

El Pabellón Chino

Ambos edificios han sido catalogados como patrimonio desde 2019. Sin embargo, el paso de los años y la falta de mantenimiento han deteriorado estas estructuras, llevándolas casi una década en estado de degradación. Específicamente, desde 2013 han permanecido cerrados al público debido a la debilidad estructural de sus instalaciones.

En un inicio, el Pabellón Chino estaba destinado a ser un restaurante, un propósito que nunca se concretó, principalmente debido a la muerte de Leopoldo II y, posteriormente, a las guerras mundiales. Más tarde, fue donado al Ministerio de Asuntos Exteriores, que utilizó el complejo como una exposición permanente de productos importados de China y el Lejano Oriente.

El sitio ha atravesado varios procesos de renovaciones, cambios de uso, reaperturas y cierres a lo largo de su historia, antes de llegar a su estado actual de deterioro. El gobierno belga tiene planeada una inversión privada estimada en 5 millones de euros para el Pabellón. La empresa encargada de su restauración es la Régie des Bâtiments, y se espera que esté lista a más tardar en 2027, coincidiendo con el aniversario de las relaciones diplomáticas entre China y Bélgica.

Acercamiento a la Fachada Principal

El estilo del Pabellón destaca por ser principalmente un exponente del chinoiserie en Bruselas, intentando imitar el arte y la arquitectura china. Incorpora en su diseño elementos como dragones, figuras chinas, porcelana en su mobiliario y una gran variedad de motivos, detalles y ornamentos florales.

La estructura del Pabellón está compuesta por un edificio principal rodeado de un jardín del mismo estilo, integrando la naturaleza con el ser humano, tal como lo propone el feng shui. Su techo, de forma curvilínea y compuesto por miles de tejas de cerámica, imita los techos tradicionales de China.

En la fachada, se encuentran esculturas y relieves que representan dragones, flores y otras figurillas chinas. Además, cuenta con los colores vibrantes típicos de la arquitectura china: rojo, dorado y verde.

El interior está diseñado para evocar la elegancia y el exotismo de Oriente, con paredes decoradas con paneles de madera tallada y pinturas que representan escenas de la vida cotidiana china. También alberga diversos objetos de arte y productos importados de China, como porcelana y seda.

Vista Interior del Pabellón

El kiosko que acompaña al pabellón

Icono

Cultura material

El pabellón Chino de Bruselas

Tema: Arquitectura

Tiempo: 1900- 1909

Eventos históricos: Chinoiserie