Díaz Yubero, Ismael, “El hambre y la gastronomía. De la guerra civil a la cartilla de racionamiento”, pp. 457-458.
Juego de ruleta creado por Strauss, un austriaco nacionalizado mexicano y Perle, súbdito holandés. Aparato que consiguieron instalar en el casino de San Sebastián en 1934. A partir de ese momento se creó la figura del estraperlista, quien llevaba esta ruleta a todas partes y era perseguido por el gobierno, la iglesia y los ciudadanos, pero también era recurrente en toda la producción cultural española durante la posguerra.
“La figura del estraperlista fue frecuente en la novela, el teatro, el cine y, por supuesto, en la prensa. Para muchos fue la mejor manera de hacerse rico y de amasar enormes fortunas. Es cierto que, como en todas, también en esta profesión hubo niveles diferentes y mientras unos apenas sacaban para poder comer, otros hicieron auténticos “agostos”. Muchos perfeccionaron su actividad y tras iniciarse trayendo unos panes o unos chorizos de sus pueblos, acabaron obteniendo concesiones de importación de materias primas, máquinas, vehículos, etc. y, así, el estraperlo, que nació del hambre de los semejantes, terminó siendo un modo de vida e implantándose en una sociedad en la que los toques de corrupción eran frecuentes y de los que no estoy seguro que no estemos sufriendo aún, las consecuencias de algo que fue corriente durante mucho tiempo.”
Hecho histórico: post guerra española.
Fecha aproximada: 1934