Dosde. (n.d.). Gaudí y el Colegio Teresiano de Barcelona. Recuperado el 7 de febrero de 2025, de https://www.dosde.com/discover/colegio-teresiano/?srsltid=AfmBOorL2fsh7-6m7fraDxavBbpX8PgpBP6GdiwQA-1bI-K8uCS0jPc7
El Colegio de las Teresianas es una obra realizada por Antoni Gaudí, construida entre 1889 y 1890, por encargo de la Compañía de Santa Teresa de Jesús. El edificio tiene como objetivo ser un convento y centro educativo para la Congregación de Religiosas Teresianas, fundada por San Enrique de Ossó.
Esta obra destaca por su especial diseño que fusiona el simbolismo religioso y las formas propias del estilo modernista de Gaudí, todo ello basado en la referencia a la obra de Santa Teresa, «El Castillo Interior». La obra refleja la espiritualidad de la Congregación a través de sus elementos decorativos, sus formas y la disposición del edificio.
Diseño
El Colegio de las Teresianas sigue una planta cuadrada, que se completa con tres plantas de altura y una terraza transitable, conformando una estructura compacta y eficiente.
En su fachada principal, se destaca un pórtico de entrada con una celosía de influencia mudéjar, una de las características que hace que esta obra sea única dentro de la arquitectura de Gaudí. La fachada lateral del edificio está decorada con elementos medievales, como almenas y pináculos, que remiten a las fortalezas y castillos, en alusión a la figura mística de Santa Teresa.
Espacios
Fachada Principal: La fachada se compone de un pórtico monumental, enmarcado por una celosía de estilo mudéjar, que marca una clara entrada al edificio. Este pórtico se abre hacia un espacio que proporciona acceso a los diferentes puntos del colegio, mientras que las almenas en la parte superior de la estructura evocan una estética medieval.
Planta Baja: La planta baja está dividida en varios espacios que sirven como áreas comunes para el centro. Este nivel se distingue por el uso del ladrillo y piedra triturada, que es un material más económico pero de gran simbolismo. Las paredes de la planta baja están reforzadas con una serie de elementos decorativos que simbolizan la espiritualidad de la congregación.
Primer y Segundo Piso: Los pisos superiores albergan las habitaciones de las religiosas y las áreas de clase. Aquí se encuentra un juego de ventanas de arcos de medio punto en la parte superior que proporcionan una iluminación natural. Estas ventanas son una de las características distintivas de Gaudí, que las usa no solo como elementos funcionales, sino como elementos decorativos en su obra.
Cubierta: En la cubierta del colegio, se pueden observar formas irregulares que son típicas del estilo de Gaudí, un enfoque innovador en la época. La cubierta transitable está rodeada de una serie de chimeneas de ladrillo, que sirven como función estética y de ventilación, un detalle que también se puede encontrar en otras obras del arquitecto.
Interior del Colegio: El interior sigue una clara división entre espacios religiosos y educativos, destacando por una clara simplicidad en cuanto a funcionalidad y decorado. Las columnas y arcos son elementos arquitectónicos comunes, pero con detalles que refuerzan la estética modernista y la espiritualidad del lugar. El jardín central está rodeado por un corredor cubierto, proporcionando acceso a las habitaciones y aulas.
Detalles
Elementos Decorativos: La decoración del Colegio de las Teresianas incorpora elementos simbólicos, tales como anagramas de Jesucristo, escudos carmelitas y cruces de cuatro brazos, representando la devoción religiosa de la comunidad. Además, la estructura es adornada con trencadís, una técnica característica de Gaudí que cubre algunas de las superficies verticales.
Uso del Material: Gaudí utilizó materiales comunes como el ladrillo, pero los empleó de una manera innovadora. En la fachada principal, la estructura se mezcla con detalles decorativos en piedra y un uso notable de trencadís (mosaicos de cerámica rotos) en las superficies. Esto da una sensación tanto de solidez como de fluidez estética.
La Teja y los Elementos Verticales: En varias de las cubiertas y techos, Gaudí empleó una mezcla de tejas de cerámica para dar textura y funcionalidad, que al mismo tiempo crea un juego de luces y sombras que es muy característico de su estilo.
Simbolismo Religioso: La obra también incluye muchas referencias a la espiritualidad cristiana, como el uso del escudo carmelita que está presente en varios puntos del edificio. La forma del edificio y sus detalles reflejan la devoción hacia Santa Teresa y su legado.